El acoso es un problema generalizado que crea gran alarma social desde hace años, y que, aunque hoy se trata con programas de identificación y prevención en el ámbito escolar, se sigue padeciendo, en sus diversas formas de hostigamiento o violencia. Lo entiendo como cualquier forma de maltrato (psicológico, verbal o físico) producido por un abuso de poder y fuerza, dirigido siempre a una persona más “débil”, que se produce de forma reiterada a lo largo de un tiempo, y es deliberado, sistemático y repetitivo.
Se puede referir al contexto escolar (bullying), pero también sería aplicable este análisis experiencial, al ámbito laboral (mobing).
En el taller propongo la utilización de algunas metodologías activas, como el Psicodrama y el Sociodrama, para explorar los indicadores o manifestaciones individuales y grupales en esta situación, respecto a las actitudes habituales de las partes implicadas, para poder identificar y elaborar después estrategias de transformación.
La finalidad del taller y de la propuesta, es la de estimular la toma de conciencia sobre cómo se interviene en la producción y el mantenimiento del acoso en el ámbito social, incluso desde la pasividad y la inacción, para identificar después los posibles cambios a realizar.